domingo, febrero 27, 2005


Mártires del Compás Posted by Hello

QUE NO CALLE EL CANTOR

Entre los recuerdos que una se trae de un viaje, nunca falta un buen disco que solamente en la tierra visitada se puede encontrar. Eso hice con uno que escuché en un pequeño bar de Murcia en mis vacaciones navideñas: Simpapeles.es Compapeles.son es el más reciente disco de Los Mártires del Compás, un disco como los los que ya no se veían desde los 70's, cuando la música no solamente era para enamorarse, endulzar los oídos y el alma, sino que además era un instrumento de expresión y denuncia social. No sé si fue la voz sensual y desgarrada de Chico Ocaña, la talentosa guitarra flamenca de Manuel Soto, o las letras las que me enamoraron casi inmeditamente de este disco. Las letras, - casi todas de Chico Ocaña también - reivindican el derecho al trabajo de los inmigrantes,

" si no tiene papeles el aire,
ni la tierra ni la mar,
pa' que quiero yo papeles
si mis sueños son la libertad,
tirar los muros y las fronteras
y que el mundo libre pueda abrazar"

o denuncian el racismo contra los negros,

"no te metas con la negra
que también es de este mundo,
no te metas con la negra
que también es de esta tierra"

o hacen un recuento del desastre del derrame de combustible en los mares de Galicia,

"Oh Galicia Calidades
Quién se fue de cacería,
dejndo que se tiñeran de chapapote
los azules de tus mares?

Otras canciones en el disco carecen de cariz de denuncia, pero supuran en sus notas esa sensualidad y romanticismo de la música flamenca y el cante gitano, como en la canción Serengueti:

"Por el Serengueti de tu cuerpo
mis manos son leones hambrientos
que, al tocar tus pechos,
se escapan dando saltos de gacela..."

Un disco flamenco, con "palmas y jaleo", muy ecléctico, pues la guitarra acústica se mezcla con arreglos de guitarra eléctrica muy bien logrados, pero quizá su mayor mérito se encuentre en la decisión de este grupo de hacerse eco de las voces silenciosas de los desprotegidos en España. Lo recomiendo ampliamante.

Y en México, se han callado los cantores para siempre?

Simpapeles.es Compapeles.son
Mártires del Compás
Warner Music Spain S.A.
2004





viernes, febrero 25, 2005


Viejo Amigo por michael Humpries Posted by Hello

VIERNES DE JEANS

Pantalón de mezclilla (jeans o vaqueros): libertad, en franca oposición al "business casual", los tacones, las corbatas, los sacos y las medias. Los viernes las sonrisas se reparten generosas - (por qué no todos los días, qué tiene diferente un día que otro? )- y todos vamos de jeans. Viernes mágico que aparece dinero que tintinea en el bolsillo, que antecede una esperanza, de dos días con sus dos noches para dar rienda suelta a los sentidos; para ver el sol y las estrellas. Con jeans diez años menos, los pasos son más libres y más largos. Si no hace tanto tiempo que todos los días los llevaba y me ilusionaba comprarme unos diferentes cada mes con mi paga semanal. Jeans que eliminan las fronteras de los pobres y los ricos; para sentirse uno mismo; deshacerse de etiquetas impuestas o forzadas. Jeans que hacen que los muchachos volteen a ver a las muchachas y viceversa, y eso hace de los viernes divertido.

jueves, febrero 24, 2005


Vino Tinto Posted by Hello

UNA COPA DE VINO

Las bondades del vino tinto van más allá de sus probadas cualidades medicinales: mantener al corazón en buena forma – la más popular de ellas –; pero la que más me gusta es la facultad inmemorial que posee de relajar los sentidos de la manera más noble posible; inducir suavemente a la conversación mesurada y facilitar el desahogo gradual de las experiencias buenas y las malas después de un arduo día de trabajo. Una copa de vino de color hermoso al llegar a casa, y un interlocutor afín, masajean el espíritu y ablandan las asperezas del alma. Su labor de terapeuta ha de hacer que vayas a la cama renovado y en paz con la vida y el destino.

martes, febrero 22, 2005


Sleep by Anry Posted by Hello

DESPERTAR

Un resorte misterioso me catapulta desde algún sueño profundo y abre mis párpados aun antes de que suene el despertador. Las sombras me rodean pero las manecillas son fluorescentes y noto triunfal que todavía quedan diez minutos antes de que el timbre repiquetee. Adopto la posición más cómoda y cierro nuevamente los ojos para dormir un poco más pero solamente logro divagar entre algún sueño y la jornada que me espera inexorable. A pesar de ser apenas las cinco, los sonidos de los primeros autobuses pasando raudos me impiden - entre otras cosas - conciliar nuevamente el sueño. Un majara (cómo diablos se le ocurre a esas horas!) con la radio del coche a todo volumen completa la orquesta de la calle y pienso que hay un complot en contra de mi sanidad mental. Ya que no duermo, repaso mentalmente la presentación de las nueve y lamento no haber dedicado más tiempo a hacerlo la noche anterior. Hago recuento de las cosas por hacer durante el turno en la maquila y sopeso que sin importar la inversión de esfuerzo, transcurrirán los años y la vida sin que pueda dar alcance a su golosía. Finalmente el despertador hace su trabajo de verdugo torturador anunciándolo con su bip bip hacha corta-sueños. Me desquito aplastando su cabeza azul de plástico y cuestiono su poder perverso de enano retrasado.

Entonces abro ya del todo los ojos, los cuelgo en el techo y recorro las sombras fantasmales de la casa. Me reprocho la amargura pensando que gran parte de mis compañeros están ya en la maquila esperando comenzar el turno. Disfruto un poco más de la tibieza de las cobijas y el brazo amoroso del que está a mi lado me retiene antes del salto a la realidad del nuevo día. A mi pesar me deshago de su abrazo y profiero una maldición que nadie escucha y me pregunto cuándo fue la última vez que en su lugar decía una oración de gracias. Fue cuando niña?

Finalmente me incorporo y sospecho que a cada paso que doy, hay algo de la vida que se escapa.

lunes, febrero 21, 2005

ORACION DE UNA MAQUILA EL DOMINGO POR LA NOCHE

Dios que estás en las alturas, no dejes que se me haga tarde en la mañana, mira que si vuelvo a faltar en lunes, un descanso seguro de tres días me gano. Si así no me alcanza lo de la semana. Mira que estoy muy desvelada porque hubo que trajinar mucho en la casa y los niños ya ves que los traigo malos y no pude dormir de tanta levantada.

Cuídame por esas calles oscuras que atravieso en madrugada hasta el autobús y después hasta tomar el otro en el centro para llegar sana y salva a la maquila.

Permite que me dejen entrar si llego un poco tarde. Que el guardia no de cuenta si me paso unos minutos de la hora de entrada; no vaya a ser que me regresen y me pase algo al volver a casa. Tendría que caminar muchas calles solitarias y con todo lo que pasa nunca se sabe...

Que la jornada sea fácil y que no me tiren tanto rollo en esas juntas porque no les entiendo nada y además se me cierran los ojos del sueño, y luego me regañan.

Que aunque sea lunes, la comida esté buena en la cafetería porque se antoja un menudo o ya de perdis unos tacos de buche. No como todos los lunes que los cocineros andan crudos y siempre salen con su chicharrón en salsa verde con frijoles.

Ay te encargo a los niños que los dejé con la vecina y no le tengo toda la confianza pero qué le voy a hacer si no tengo quién los cuide. Es lo que más te pido, que los protejas de todos los males y que un taco no les falte.

Perdona que no hago más que pedirte y no te puedo dar nada, pero yo qué te puedo dar si nada tengo y nada tendré. Ahora y en la hora de nuestra muerte amén...

jueves, febrero 17, 2005


Towards the America por Beti Alonso Posted by Hello

UNA MAQUILA AMERICANA

Los viajes aportan mucho más al esclarecimiento y ampliación de nuestra visión del mundo que cualquier lectura u otro método de absorción cultural empleado para acrecentar nuestro conocimiento universal. Lo he experimentado cada vez que he tenido la oportunidad de salir del microcosmos de mi existencia limitada por fronteras físicas y psíquicas. Podría extenderme sobre los beneficios experimentados a nivel íntimo y personal de estas experiencias viajeras que me han permitido comprender mi pertenencia al universo conocido a nivel íntimo y personal, pero me interesa ahora hablar concretamente sobre mis impresiones al visitar en varias ocasiones una empresa norteamericana, es decir de los Estados Unidos, y cómo se compara ésta con la maquila de este lado del Río Bravo.

Esta maquila americana es gigantesca y manufactura productos terminados que llevan a su vez, componentes que se fabrican en la frontera mexicana, específicamente en la maquila en la que ahora trabajo. Nada más llegar al estacionamiento, se advierte la brecha económica entre los trabajadores mexicanos y los de allá: coches de modelo reciente y marcas de moda. Al entrar al área de recepción, banderas multicolores representativasde los países de origen de los trabajadores que conforman la fuerza laboral están colgadas en el techo. Un rasgo respetuoso de la Gerencia de esta empresa ante la variedad cultural de sus empleados. Al observarlas, una se da cuenta de la movilidad de las masas del mundo y de lo frágiles que pronto resultarán las barreras por contener la ola de seres humanos hacia regiones más prósperas. Nada ha cambiado desde la Era de la Glaciación, cuando el hombre por hambre caminó por senderos mortales para sobrevivir: los mexicanos por ejemplo cruzan desiertos hirvientes en pos de mejores condiciones y gran parte perece en el intento. El fenómeno de la mundialización forzará aun más esta migración masiva.

Gigantescas maquinarias y prensas de muchas toneladas pasan como en película mientras recorres los pasillos de las áreas de producción. Lo rítmico de los sonidos estridentes de la maquinaria me recuerda la película de Lars Von Triers "Dancing in the Dark".

Al pasar observo a los trabajadores y los comparo con los de la maquila mexicana. Los empleados nacionales americanos en promedio son mayores que mis connacionales. Los jóvenes en Estados Unidos estudian, mientras que los jóvenes del Tercer Mundo tienen que ganarse la vida. Sin embargo, hay muchos empleados inmigrantes que también son muy jóvenes. Los hay chinos, sudamericanos, mexicanos, indios y pocos europeos, cuyo nivel de vida es mejor y por lo tanto, sin tanta necesidad de emigrar. Los empleados inmigrantes por lo general reflejan ese estado de inferioridad al que han sido sometidos no solamente en su propia tierra, sino el que adoptan una vez asumido que el mundo al que han llegado los supera en tantos sentidos. Sin embargo, su actitud no es tan sumisa ni tan melancólica como los que están en latitudes más al sur de la tierra americana. Todos ellos han tenido la valentía que ya muchos quisiéramos: largarse un día con una mochila pletórica de sueños a cuestas; luchar con denuedo por un lugar en territorio ajeno, y afrontar un destino solitario. Para eso se necesita un par.

La gran diferencia probablemente estriba en lo que los trabajadores se llevan al bolsillo cada día de pago. El salario mínimo supera al mío a pesar de tener yo un puesto administrativo medio.

Al paso de visitantes como yo y cualquier otro todos los trabajadores sonríen o saludan. Si son mexicanos, su simpatía es mayor. Sus miradas no son ausentes como en este lado, donde los corazones oprimidos por la pobreza impiden mirar al mundo y a los otros, y los pensamientos son prisioneros de la preocupación.

Con razón todos se quieren ir "al otro lado"

martes, febrero 01, 2005


Manos Posted by Hello

MANOS

Manos que ensamblan y sueldan.
Manos oscuras y sudorosas que martillean y cortan. Que perforan.
Manos curtidas de polvo y aceite.
Manos que ponen y quitan cosas, que suben y que bajan, que levantan y empujan.
Manos que tuercen, que acomodan, que sortean, que taladran, que jalan palancas y etiquetan y empacan.
Manos de mujeres y hombres casi niños. Manos que troquelan, que cosen, que pegan., que arreglan.
Manos que también acarician y que aman y que sienten.
Manos que se extienden, que piden, que esperan, que poco reciben.
Ay! cuántas manos que no se toman unas a otras.
Tantas manos, tantas, que no hacen nada por ellas mismas, ni unas por las otras.
Si todas las manos fueran juntas, si hicieran una fuerza sola!!
Serían todas un puño golpeando fuerte, exigiendo mejor suerte!